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martes, 8 de marzo de 2011

Amor eterno

¡Aquí tenéis la segunda parte del primer capitulo de este microrelato! Espero que sea de vuestro agrado =) Aún queda una tercera y última parte, y ya pasaremos al capítulo 2.
Como siempre digo, espero vuestros comentarios expresando vuestra opinión sobre el relato. Al terminar cada capitulo, en este mismo blog podréis realizar una encuesta.
Os dejo que leáis la segunda parte y ya me diréis que os ha parecido.
Muchisimas gracias a toda la gente que invierte unos minutos de su vida en leer este microrelato y en expresar su opinión sobre él.
Un besazo muy fuerte. ^^
Capítulo 1: El aire que me mantiene con vida (parte II)
Adam no pudo evitar esbozar una leve sonrisa. Eso ya se había convertido en acto inmediato. Ella no pronunciaba palabra, pero él podía escuchar una pequeña risita contenida proveniente de su amor. El chico cogió las tiernas y delicadas manos de Alice, las separó lentamente de sus ojos y las aproximó a su boca para besarlas. Luego se giró y la vio. Hoy estaba más preciosa que nunca. El verano le sentaba de maravilla. Llevaba un amplio vestido color lavanda con un estampado de grandes flores. Iba con su pelo castaño claro suelto, tan solo llevaba recogida la parte izquierda del pelo con un clip en forma de florecita de color blanco. Sus mejillas estaban coloradas a causa del sol, y sus ojos verdes brillaban intensamente. Adam se sorprendió un poco al ver que iba descalza.
El joven besó los tiernos labios de Alice, rodeando su cintura con los brazos, sin poder evitar la tentación de acariciarle su suave y liso cabello.
-          ¿Te han atracado? – preguntó Adam bromeado.
-          ¿Cómo lo has adivinado? – dijo Alice intentando permanecer seria.
-          Chica, tan solo hace falta mirarte los pies…  Eso te pasa por llevar siempre unas sandalias tan bonitas, que después te las roban - contestó el chico sin poder contener una sonrisa.
-          Así que te has fijado… Pero, oye… Que no me han robado las sandalias. Han intentado robarme el bolso, y yo me he defendido atizando al atracador con las sandalias. Él ha escapado, pero mis sandalias se han roto, así que las llevo guardadas en el bolso… - explicó la joven con una voz seria y triste.
-          Espera… ¿Os sea que iba en serio lo del atraco? Pero ¿por qué no me has llamado? ¡Hubiera ido inmediatamente a ayudarte! – preguntó Adam preocupado.
-          Lo siento, es que ha ocurrido todo tan rápido… - se excusó Alice.
-          Bueno ya da igual… Lo importante es que estás bien. ¡No puedo creer que haya gente tan horrible en el mundo! – se quejó Adam.
-          Ya, yo tampoco puedo creerlo. Ha sido un sueño tan real… - dijo Alice, ahora sí, esbozando una pequeña sonrisa.
Adam se quedó pensativo unos poco segundos hasta que captó la última frase de Alice. En el instante en que entendió la tomadura de pelo de Alice, fulminó con la mirada a su chica.
-          ¡No es posible que haya caído otra vez! ¡Esta vez voy a tenerte que castigar de verdad Alice! – dijo Adam con una mirada maliciosa.
Alice, oliéndose lo que Adam iba a hacer, empezó a huir rápidamente.
-          ¡No huyas cobarde, y asume tu castigo! – gritó Adam persiguiéndola velozmente.
En pocos segundos se convirtieron en el centro de atención, pero no les importaba en absoluto. Cuando estaban juntos, estaban en su mundo, aislados de cualquier otra persona. Era cierto de que ya no tenían quince años, y ya no tenían edad para ir correteando por la calle, pero para ellos, sus dos décadas vividas no eran un obstáculo para seguir viviendo al límite como los adolescentes.
A medida que iban corriendo, se fatigaban más y más, pero seguían corriendo con las mismas ganas. Adam no pudo evitarlo y soltó una sonora carcajada al ver los pies negros de Alice. La pareja continuó corriendo y corriendo hasta llegar al acantilado. Los adolescentes de antes ya se encontraban en la arena tomándose un rico helado, y ellos dos pudieron adueñarse de aquel lugar. Finalmente Adam se lanzó encima de Alice agarrándola fuertemente con los brazos, rodeando su cuerpo completamente, como si de una cuerda se tratase. Los dos respiraban con dificultad, pero les sobraba aire para reírse.
-          Te pillé, cabra – dijo Adam riendo.
-          Suéltame o te atizó con las sandalias – rió Alice.
-          No serías capaz – le susurró el joven.
-          ¿Qué no? Bueno, de atizarte con las sandalias quizás no, pero sí de esto... – dijo Alice.
La chica se desprendió de Adam con fuerza, separándose de él, sorprendiéndole.
-          ¿De qué serías capaz, eh Alice? – dijo el chico con mirada maligna.
-          ¡De esto! – gritó la chica de repente.
Alice levantó su pie derecho negro del suelo y lo situó a escasos centímetros de la boca del chico, el cual se retiró de inmediato. La joven, cojeando, se acercó más al rostro de Adam.
-          ¿Qué, ahora no te acercas tanto a mí verdad? – dijo Alice riendo.
-          ¿Pero como puedes ser tan cochina? – preguntó retóricamente Adam apartándose poco a poco del pie negro y sucio de su chica.
Alice bajó su pierna un momento para descansar, momento que Adam aprovechó para cazarla nuevamente. Se abalanzó encima de ella y la volvió a envolver con los brazos. Alice soltó un gritó inmediatamente.
-          ¡Llegó la hora de tu castigo bonita! – gritó el joven con voz malvada.
Con ella sujeta entre sus brazos, Adam cogió carrerilla y corrió hacia el borde del acantilado. Antes de que Alice pudiese expresar queja alguna, ya estaban los dos en medio del aire, con el mar en sus pies. La chica soltó otro gritó durante la caída, grito que quedó insonorizado en cuanto se sumergieron en el agua.
Al cabo de unos pocos segundos los dos sacaron sus cabezas del mar salado. Con la respiración entrecortada y entre carcajada y carcajada Alice intentó hablar.
-          ¿Estás loco? ¿Es que quieres que nos matemos? – dijo Alice riendo.
Al pronunciar esa frase, a Adam le vino en mente su visita al hospital esa mañana. Y recordó la mala noticia, y el terrible sufrimiento que provocaría en Alice. Y el chico no pudo más que eliminar la sonrisa de su cara. Agradeció estar en el mar, mojado de arriba abajo. Así, las pequeñas lágrimas que no podía contener se camuflaban perfectamente sin que su amor se percatase de ello.
Alice situó sus manos detrás del cuello y la cabeza de Adam y lo besó. Varias veces seguidas. Pero paró al ver que Adam no ponía mucho de su parte. La joven le puso el pelo hacia detrás y le acarició las mejillas con las yemas de sus pulgares.
-          ¿Te ocurre algo? – preguntó Alice poniéndose seria.
Adam la miró con unos tristes ojos y pensó que responder.
-          No es nada, tranquila – mintió intentando sonreír.
-          Venga ya, ¿esperas que te crea? Te conozco muy bien, Adam, y se cuándo te pasa algo. Cuando he llegado antes ya te he visto extraño, muy pensativo. Estabas con una mirada triste  y perdida. A mí no me puedes engañar. Por favor, cuéntamelo. Si no lo haces no sabré como ayudarte. – dijo Alice.
-          Ah, lo de antes… ¡Era un simple dolor de cabeza, tranquila! Y ahora simplemente he tenido como un escalofrío, una mala sensación en el cuerpo. Ni yo mismo sé lo que es. Jajaja. Que cosas ¿eh? – contestó Adam haciendo un esfuerzo por reír.
-          Mira voy a creerte. Pero como me entere de que te pasa algo, te castigaré, y te tendrás que comer mi pie sucio – dijo Alice zanjando el tema.
-          Vale, y ahora… ¡tonto quien salga el último del agua! – gritó Adam impulsándose para nadar.
-          ¡Aaahh! – gritó Alice de repente.
-          ¿Qué te ocurre? – preguntó rápidamente el joven acercándose a la chica.
-          ¡Tonto! – gritó Alice.
La chica hundió la cabeza de Adam en el agua y se puso a nadar de inmediato para salir antes del agua.
-          ¡Eres una tramposa! – gritó Adam nadando tras ella.
Cuándo salieron del agua Alice abrazó cariñosamente a su chico en modo de disculpa. El sonido de las tripas ambos interrumpió el bonito momento, y se dieron cuenta de que aún no habían comido, así que Alice invitó al joven a comer a su casa.

5 comentarios:

  1. Me encanta!!! ya te dije que me enamoro de tus personajes!!! OO Adam (L) jajajajaja pues nada que sigas colgando fragmentos que quiero leer ya el final, que me dejaste con unas ganas!!!!!
    También está super bien escrito, si es que te expresas magníficamente!!! La paranoia de historia va a resultar ser un tremendo éxito!!! jajaja

    Te quiero Musky!!!

    Hasta esta tardeee (K)

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  2. Ruskyyy!!! Mi fiel seguidoraa (L)
    Muchas gracias por el comentarioo ^^
    El segundo capitulo está en proceso, i lo estoy haciendo mas largo XD
    porque lo escrivi antes de escrivir el primero.. y las cosas cambian XD q rarita soy v.v' XDD
    Tú sigue escriviendo más, q quiero saber que pasara con Ethan y con Laura jijijiji XDD
    un beso Rusky super escritoraa (L)
    nos vemos esta tardee ^^

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  3. hohoho se puede saber que le pasa a Adam??¬¬
    bueno, si rara eres, como escribes el segundo capitulo antes que el primero??? xDDD
    bueno tequiero musky!!!!! hasta la tardeee!!

    Maria

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  4. hohohoh muchas gracias Iuskyy (L)
    escrivi el 2º capitulo antes q el primero xk me vino una idea rara a la cabeza, i ese era el segundo capitulo, pero claro, todo tenia q comenzar por algo, i ese es el primer capitulo XD en fin ya veras...XD
    i lo que le pasa a Adam esque... esta enfermo XDD i no le queda mucho de vida pobret =(
    y ya veras que es lo q hace hohoho XD
    es muy malotee XD mejor dicho un poco egosista XD en fin, me callo la boca que no quiero que se sepa nada FEAAA xD
    te quiero Iuskyy nos vemos esta tardee ^^

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  5. esta muy interesantee!! k le pasa a Adam??
    tendre k seguir leyendoo!! =D

    m encanta tu forma de escribir
    has pensado en dedicarte a esto?? serias muy buena escritora

    saludos!!

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