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sábado, 7 de mayo de 2011

REFLEJOS

¡Hola! Disculpad por la espera pero esque he estado un pelín ocupada y la inspiración no me ha acompañado T_T (Bueno, de echo tampoco me ha acompañado cuando he escrito este 4º capitulo, por lo que no espereis gran cosa) XD Parece que en este relato estoy usando demasiado lenguaje estandar, pero al menos espero que sirva para sentiros un poco más cercanos a los personajes quiénes son adolescentes =P
Deseo no aburriros... Espero que os guste! Ya me direis que os ha parecido vale? Un besazo a todos los lectores/as!! ^^
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Capítulo 4 – Bajo la luz de la luna.
Cuándo la madre de Ilyra entró en su hogar dejando marchar a su hija no pude más que pensar que seguramente Ilyra había escapado muchas otras veces de casa, volviendo a ella al poco tiempo, por lo que su madre ya no se preocupaba demasiado. Me sentí estúpido, inútil, crío. Aquella joven había hecho muchas más cosas que yo, había vivido más experiencias, tenía iniciativas en la vida. Yo simplemente me había limitado a seguir el curso de mi vida sin pensar en el futuro. En realidad no me sentía como si tuviese diecisiete años. Me percaté de que seguía actuando como si tuviese trece años. Quizás había llegado la hora de ser un poco más independiente, de tomar decisiones por mí mismo, de vivir la vida. Entré en casa, subí las escaleras de tres en tres, y una vez en mi habitación cogí mi móvil y mi cartera. Pensé que no necesitaría nada más, y a parte, no podía perder el tiempo.
-    Papá me marcho – dije sin dejar de correr.
-    ¿Dónde vas? – me preguntó sin mucho interés.
-    No lo sé – contesté saliendo de casa antes de recibir otra pregunta.
No sabía por qué, pero al salir de la vivienda me sentí libre y no dejé de correr. En parte porque quería alcanzar a Ilyra y en parte porque deseaba ser un pájaro. Reí. Eran incalculables las horas que había pasado delante del televisor viendo series de adolescentes llenos de energía, de vida. Jóvenes que sabían divertirse, que cometían locuras sin pensar en las consecuencias. Les envidiaba, y siempre terminaba pensando: “cuándo yo tenga esa edad seré como ellos. Mi vida será un no parar, será tan divertido…”. Y sin embargo ahora que tenía esa edad nunca había hecho nada fuera de lo normal. Hoy, al fin, estaba cometiendo mi primera locura, y era divertido.
Sí, reía. Pero al fin y al cabo una decisión espontanea era una decisión espontanea. Estaba fuera de casa, nadie sabía dónde me dirigía, ni siquiera yo. Además, no tenía ni idea de dónde había ido Ilyra, por lo que terminé preguntado a varias personas que pasaban por allí.
Pasaron las horas, el sol se despidió, y la luna apareció. Dios, ¿Qué había hecho? ¿Qué se supone que hacía yo a las once de la noche tirado en una pequeña plaza desierta? Cierto, había ido en busca de Ilyra. Pero en realidad solo hallé el fracaso. Ni siquiera sabía dónde me encontraba exactamente.
Me cansé de estar allí perdiendo el tiempo, y al fin decidí terminar mi búsqueda cuándo empezó a llover. Me levanté del banco dónde minutos antes me había sentado y empecé a correr en busca de algún lugar dónde protegerme de la lluvia. La lluvia y la tierra del parque jugaron en mi contra provocando que resbalase y cayese al suelo patéticamente. Agradecí que no hubiese nadie por los alrededores para verme.
-    Idiota – dijo una voz femenina que me era familiar.
Levanté la cabeza ruborizándome un poco tras sospechar quién me había dicho aquello.
-    Ily… Nicole – dije recordando que ella no sabía nada.
-    ¿Se puede saber qué haces aquí a estas horas de la noche? Pensé que tú eras un niño bueno… - dijo Ilyra con una sonrisa pícara.
-    Claro, como tú eres una niña mala y bipolar… - dije levantándome del suelo y sacudiendo la suciedad de mi ropa.
-    Al menos no me dedico a espiar a la gente – me dijo fulminándome con la mirada.
Tardé varios segundos en entender aquella última frase y en pensar que debía responderle.
-    Con que me viste… - contesté tímidamente.
-    Hombre, con tu gran habilidad para camuflarte no es que sea muy complicado… - ironizó la joven – No me importa que conozcas mi verdadera identidad y la de mi familia. Tan solo te advierto de que como le digas algo a tu padre te corto la lengua, te meto la cabeza bajo agua hasta dejarte inconsciente, te reanimo, te amputo las cuatro extremidades y luego te quemo vivo con un mechero poco a poco – dijo Ilyra muy sádicamente.
-    Y después te detendrán… No sé qué clase de persona te crees que soy, pero yo jamás haría algo que pudiese perjudicar a un reflejo – confesé.
-    Lástima, tenía ganas de hacerte sufrir… - dijo Ilyra con cara triste.
La miré con un rostro lleno de fastidio y una mirada fulminante.
-    Es una broma niño bueno – me dijo tocándome con su dedo índice la punta de mi nariz.
Luego rió y empezó a dar vueltas como si de un avión se tratase. Su pelo volaba libremente alrededor de su cuello y el aroma frutas que desprendía viajaba hasta mí. Esbozaba una sonrisa que deslumbraba, hipnotizaba. Sus ojos verdes, enormes, encantadores, hubieran sido capaz de amansar a la fiera más salvaje. Bajo la luz de la luna ella era realmente hermosa, poseía una inusual belleza que debería estar prohibida. Su blanca piel resplandecía y con paso seguro se acercó a mí y me agarró de las manos para que bailase con ella. Yo no sabía bailar pero en aquel momento mi voz me había abandonado. Y entonces, cuándo nuestros cuerpos permanecían tan cerca, fue cuándo pude oler a la perfección su dulce aroma, un aroma tan sensual, tan cautivador tan embriagador que deseé olerlo eternamente. Me dejé llevar por aquella chica tan caprichosa, que depende del momento me trataba bien o me trataba mal. Aún no sabía cómo era ella realmente y por eso decidí conocerla en profundidad. Supe que ya no podría separarme de ella y que iría a dónde ella fuese.
Nuestro baile terminó cuándo yo aún estaba embobado.
-    ¿Sabes? Un perro bailaría mejor que tú – rió Ilyra sentándose en un banco cercano.
-    Eres rara. No logro entenderte. Tu físico no pega nada con tu personalidad. Tienes la cara más dulce que jamás he visto y sin embargo puedes llegar a ser las más estúpida, antipática y borde – dije totalmente decepcionado.
-    Oye para el carro, no te pases. Para estúpido tú niñato. Tan solo ha sido un comentario de broma sin importancia. Es tu culpa por tomártelo todo tan a pecho – me contestó.
-    No es verdad, eres tú que eres bipolar. Primero me llamas humano de mierda, desprecias mi ayuda, desconfías de mí sin motivos, luego eres extremadamente dulce, amable, simpática y divertida, ¿y ahora mezclas un toque de dulzura con prepotencia e insultos? ¡¿Pero tú de que vas niñata creída y repelente?! ¡Que te aguante tu abuela! – dije con intenciones de marcharme.
-    ¡Eh! ¿Dónde te piensas que vas? Ahora encima cobarde… - dijo Ilyra agarrándome bruscamente por la camisa y sentándome en el banco.
-    Mira Ilyra será mejor que nos llevemos bien. Al fin y al cabo ahora somos vecinos. Por eso he venido a buscarte, para que vuelvas a tú casa. Es muy peligroso que estés aquí sola – le expliqué.
-    Primero : ahora eres tú el bipolar; primero me pones verde y ahora te preocupas por mí. Segundo: Ya no soy tu vecina, escapé de casa porque no es seguro vivir al lado de un caza reflejos. Y tercero: se cuidar de mí solita. – me contestó la hermosa joven levantándose para marcharse.
La detuve inmediatamente agarrándola por el brazo.
-    Por favor, no te vayas… - le pedí – Dime, ¿Qué os ocurrió a ti y a tu familia? ¿Por qué os fugasteis? – pregunté con voz temblorosa.
-    Eso a ti no te incumbe – me contestó tercamente.
-    Me importa un comino que pienses si me incumbe o no, tan solo quiero saberlo – le contesté seriamente.
Seguramente fueron la seguridad y la confianza que transmitieron mis ojos los que animaron a Ilyra a hablar.
-    Está bien… Te lo contaré.
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¿Que os ha parecido? ¿Os ha gustado? ¿Os ha decepcionado? Podéis expresar vuestra opinión en los comentarios. Muchas gracias ^^


3 comentarios:

  1. MUSKY!!!! Sin duda esta es el mejor capítulo de reflejos :) ya sabes que toda parte romántica me pirra y tu has conseguido engancharme hasta el último momento de este capítulo. Vale ahora te digo lo que me ha gustado más:
    - La parte en que Ilyra y Luke se pones a bailar en el parque dando vueltas como niños pequeños, donde se puede ver dulzura, amor, alegría... Y sobretodo me ha encantado como Luke describe lo que percibe de Ilyra (su olor, su belleza, su bipolaridad tan atractiva xD)
    - También; como siempre partes que deberían se amenazas tu las conviertes en algo cómico y amenazador a la vez. Cito textualmente esas partes: "Tan solo te advierto de que como le digas algo a tu padre te corto la lengua, te meto la cabeza bajo agua hasta dejarte inconsciente, te reanimo, te amputo las cuatro extremidades y luego te quemo vivo con un mechero poco." y "¡Que te aguante tu abuela!" xD Me he reído mucho :)
    - EL lenguaje que utilizas es maravilloso, como dices nos hace entender a nuestros alocados protagonistas adolescentes.

    Vale así que en mi opinión la larga espera a valido la pena, un magnífico capítulo ;)
    Musky sigue así y publica cuanto antes el próximo capítulo ok?¿ :)

    T'estimo molt (nos vemos el lunes) :D

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  2. wow!! me encantaa!!
    esta muuuuuuy bien y estoy deseando k pongas el siguiente capitulo xD
    solo pongo un fallo a este capitulo y es la letra xD es que es demasiado pequeña y se me iban las frases =)
    estare atenta al proximo capitulo ;)
    besos!!

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  3. Muchas gracias por el comentario guapa!
    Me alegro de que te haya gustado =D
    Y gracias por el consejo! Cuando publique el proximo capitulo procurare hacer la letra más grande por tal de que la lectura sea más fácil =)Tengo ganas de leer tu segunda parte de tu relato! 1 beso guapisima! ^^

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